venerdì 14 maggio 2010

¿Qué pasa cuando la naturaleza se rebela? ¿Cuáles son la consecuencias para el hombre?




El mes pasado vimos como un “gigante” consiguió paralizar Europa. Estoy hablando del volcán islandés que volvió a despertarse la noche del pasado 21 de marzo. Al principio el espectáculo para los ciudadanos y los periodistas era inquietante a la vez que mágico, nadie podía imaginar que las cenizas expulsadas por el volcán habrían paralizado nuestros cielos. Todo esto a confirmar que Islandia es verdaderamente tierra de fuego y de hielo, ya que así se le conoce en todo el mundo.
Saliendo a la superficie el magma reaccionó violentemente al entrar en contacto con el hielo y las autoridades adoptaron medidas de emergencia desde el primer momento: evacuación total, carreteras cortadas, aeropuertos cerrados. Lentamente la situación empezaba a tomar otro aspecto, ya no era mágica sino dramática.

El 14 de abril se propagó a 8 Km de la atmósfera una enorme nube de vapor. Se produjo una serie de violentas explosiones y las cenizas crearon pánico en los aeropuertos, bloqueando millones de pasajeros ya que representan una verdadera amenaza para los aviones.


El bloqueo de los cielos causó muchos problemas a nivel económico: funcionarios que no podían ir a trabajar y empresas que por eso tuvieron que cerrar; los turistas no podían alcanzar su destino, las acciones precipitaron.En este caso las rebelión de la naturaleza no ha causado víctimas.

La situación cambia cuando hablamos de terremoto sobre todo cuando su intensidad supera los 5 grados de magnitudo. En el último periodo hemos oído casi diariamente noticias que nos informaban que en algun lado del mundo la tierra había temblado. Muchas veces el número de las víctimas es incalculable, a menos que el terremoto no ocurra en sitios como Japón por ejemplo, donde es un compañero de vida y donde los edificios son antisísmicos.

Hace poco más de un año un terremoto de magnitudo 7.2 arrasó la ciudad de L’Aquila. L
as víctimas fueron más de 300.Yo vivo en un pueblo en la provincia de Rieti, a 50 Km de L’Aquila. Para mi fueron momentos terribles porque el temblor fue muy fuerte y enseguida me dí cuenta de que algo grave había ocurrido cerca de mi. Cuando supe cual era el lugar exacto, mi primer pensamiento fue para los muchos chicos y chicas de mi ciudad que estudiaban allí. Además en los días siguientes el miedo no nos abandonó por lo chacales saqueadores que difundieron el pánico entre las personas, diciendo de no volver a las casas porque otro seísma se habría manifestado.

La situación de l’Aquila era dramática, como todos hemos aprendido por telediarios y rádio, pero fortunadamente toda la población italiana y mundial se comprometió con los ciudadanos, y hoy después de poco más de un año se puede decir que la situación se ha casi normalizado, aunque todavía queda mucho por hacer.


Pero ¿la población de Haiti tendrá la misma suerte de la de L’Aquila? Aquí el número de las víctimas es realmente incalculable. Las ayudas humanitarias fueron rápidas pero quién sabe si esta parte del mundo volverá nunca a sonreir y vivir felizmente. A veces parece que la naturaleza quiera golpear los más débiles.


No sólo los terremotos sino también los maremotos, llamados tzunami, pueden ser muy peligrosos. Nunca olvidaremos el tzunami que en 2004 arrasó las costas de Indonesia causando la muerte de más de 230.000 personas.









































































2 commenti:

  1. Como bien dijiste tú, Ilaria, el desastre ambiental es un fenómeno que tiene graves consequencias con respecto al ambiente y se define catastrófico por el número elevado de los organismos viventes que han sido afectados; por el peligro que las consecuencias producidas por esos efectos pueden representar (también para nosotros) y por la vastedad del territorio contaminado. ¡Pero no tenemos que confundir el disastre ambiental con los desastres naturales o las calamidades! A menudo estos fenómenos son amplificados por las actividades antrópicas, y por eso, no es fácil dividir las dos categorías. Por ejemplo he leido que la deforestación de un lugar donde hay colinas (entonces un desastre ambiental) puede convertir un inocuo temporal en un desmoronamiento terible, que se definirìa disastre natural si el hombre no contribuyera a empeorar la situación!

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  2. ¡Hola Ilaria! Me gusta mucho, pero me inquieta también, leer tu blog que habla de un asunto a menudo olvidado, pero de tan importancia y actualidad-sobretodo en las últimas semanas-. El fin de semana pasado, vi en la tele un documental de Alberto Angela sobre los desastres , donde se hablaba de la entrada en erupción del volcán islandés comparada a unas erupciones famosas. Se comentaba también la erupción de un volcán en Oriente, que ha dejado polvos en el aire durante tres años –una duración increíble-, cenizas que han provocado cambios climáticos. Todavía no sabemos que ha dejado en el aire el volcán islandés (y lo que podrá dejar, ya que continúa su actividad).¡ ¿parece que se acerca el fin del mundo?!

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